Es un Derecho Real: La hipoteca asegura el cumplimiento de una obligación y limita la enajenación del bien que la respalda. Es Accesoria: Dependiendo de la existencia de una obligación principal. No Otorga Derechos de Uso: Es decir, no confiere al acreedo
La hipoteca es un derecho real que asegura el cumplimiento de una obligación, limitando la enajenación del bien que la respalda. Es accesoria porque depende de una obligación principal y no otorga derechos de uso o disposición del bien hipotecado, manteniendo la posesión en el propietario. Se considera un contrato solemne, ya que requiere escritura y registro para su validez. Puede aplicarse a bienes muebles e inmuebles y es un derecho especial, pues necesita la designación específica de los bienes y la cantidad garantizada, facilitando el conocimiento de gravámenes. Además, es un derecho indivisible, lo que significa que no se puede liberar una parte del bien al pagar solo una parte de la deuda, salvo excepciones para algunos adquirientes.